Crecer dentro de una familia funcional - the.holistic.psychologist

Pocos de nosotros tuvimos la oportunidad de crecer dentro de una familia funcional. Personas que tienen una auto-valía alta, confianza y relaciones adultas saludables.

Con suerte, hay rasgos y habilidades centrales dentro de las familias funcionales que todos podemos aprender.

1. Interdependencia: Los miembros confían y dependen mutuamente sin sacrificar su sentido de yo. 

A diferencia de la codependencia, en la que los miembros se posibilitan unos a otros de manera que reprimen su crecimiento o desarrollo personal o dañan su salud emocional ( a largo plazo ).

2. Los padres no buscan a sus hijos para satisfacer sus necesidades

Los padres comprenden que su rol es apoyar y nutrir a sus hijos para que se conviertan en quién realmente son (no quienes los padres quieren que sean).

En familias disfuncionales, los niños satisfacen las necesidades de sus padres: resuelven problemas maritales, logran para los padres una sensación de autoestima y gestionan los estados de ánimo de sus padres.

3. Animan la autonomía: los miembros son animados para tener un rol en la unidad familiar como también una identidad personal.

Los miembros pueden tener sus propios hobbies, intereses y creencias personales.

4. Comunicación Clara y Directa

Los miembros piden directamente que sus necesidades sean satisfechas y cuando esas necesidades son expresadas, los miembros están abiertos y receptivos para satisfacerlas.

En familias disfuncionales la comunicación es pasivo agresiva, tratamiento de silencio, retirarse, cerrarse a escuchar, hostilidad, ciclos de ira o negación.

5. El sistema familiar puede navegar bien el estrés.

Los miembros pueden regular sus emociones, tener un pensamiento claro (racional), encontrar soluciones y confiar en ellos mismos para resolver los problemas.

En familias disfuncionales los miembros no están regulados y el estrés les causa un espiral hacia la crisis, caos, elecciones irracionales o comportamiento impulsivo.

6. Ausencia de hiper vigilancia

Los miembros permiten que otros miembros tengan su propio estado emocional y confíen si hay un problema, ellos vendrán unos a otros.

En familias disfuncionales, hay un foco crónico externo en lo que otras personas están sintiendo y el clima emocional de todo el hogar es creado por un miembro.

7. Límites claros

Hay límites y límites respecto a qué comportamiento es aceptable. Los hijos aprenden que el comportamiento dañino no es tolerable ni aceptable, es una llamada a alejarse.

En familias disfuncionales, las excusas son hechas por el comportamiento dañino y los hijos aprenden que esta es una parte “normal” de las relaciones.

8. Las relaciones están basadas en conexión auténtica

Los miembros eligen verse porque disfrutan la compañía mutua. Se comprenden unos a otros en un nivel profundo y enriquecen sus vidas.

En familias disfuncionales, los miembros se reúnen porque serán culpados o avergonzados si no lo hacen.

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Como alguien criado en un hogar altamente disfuncional, aprendí negación, bloqueos, activación y auto-victimización como maneras normales de existir.

Nunca vi modelos adultos de regulación emocional, comunicación abierta, resolución de conflictos o búsqueda de soluciones.

Cualquier situación estresante – incluso pequeñas situaciones – enviarían a todos los que me rodeaban al caos o al pánico. Lo que explicaría porqué pasé tanto de mi vida disociada.

A medida que despertamos, comenzamos a ver la disfunción de la familia más claramente. Mientras esto es “extremadamente” doloroso al comienzo, es realmente la base de la sanación.

Ya no estamos en estado de hipnosis o inconsciencia o de esto como nuestro “normal”. Y una vez lo vemos no podemos dejar de verlo.

La parte bella es que todos podemos aprender las habilidades y rasgos de adultos saludables y funcionales en cualquier momento de la vida.

Podemos re paternar a nuestro niño interior y aprender nuevas formas de existir.

Podemos desaprender comportamientos condicionados y reaprender comportamientos que sirven a quienes realmente queremos ser.