Comunicación activa - the.holistic.psychologist

Si muestras frustración o rabia suspirando, dando el tratamiento del silencio o haciendo comentarios sarcásticos, tienes un estilo de comunicación pasivo agresivo.

Este es el porqué:

Aprendemos a comunicar de esta forma cuando crecemos en un hogar en el que nunca observamos adultos que hablaran directamente sobre, procesaran y encontraran soluciones para sus problemas.

Si has sido criado en este ambiente podrías: 

- desaparecer para personas en quienes no estás interesado

- desaparecer o evitar a las personas cuando hay conflicto

- decir que estás “bien” cuando no lo estás

- esperar que las personas “simplemente sepan” lo que quieres

- siempre preguntar a las personas si están enojadas o molestas contigo

- ser hiper-vigilante de lo que las personas piensen sobre ti

- tener un impulso para preguntar si has hecho algo malo

- preguntarte si las personas están reprimiendo sus “verdaderos” sentimientos hacia ti

Esto es porque cuando niño tuviste que leer las emociones de los adultos, en lugar de que hablaran abiertamente sobre ellas.

Es útil comprender que el conflicto no es malo. El conflicto puede en realidad crear intimidad emocional. Solo necesitamos aprender comunicación activa.

La comunicación activa suena como:

- “Me siento herida por no haber sido invitada”

- “No me gusta ser presionada después de decir no”

- “Me agobio cuando me interrumpes en nuestras conversaciones”

- “Quiero que me preguntes antes de hacer planes para nosotros”

- “Necesito mayor información. Planear con anticipación es importante para mí”

- “Eso hirió mis sentimientos”

La comunicación activa no personaliza, ni se vuelve defensiva ni rechaza lo que otras personas sienten.

Esto significa practicar: regulación emocional, aprender a respirar antes de reaccionar y aprender a hacer una pausa cuando note que está a la defensiva.

La comunicación activa se enfoca en “yo”.

Por ejemplo: “Me siento”, “Yo me di cuenta”, o “Yo soy”

En lugar de: “tu siempre”, “tu no” o “deberías haber".

Después de ver la retroalimentación, me doy cuenta de que muchas personas – como yo- han aprendido estilos de comunicación pasivo-agresivos.

Es importante aprender la comunicación activa con el fin de tener relaciones saludables, definir límites y aprender a comprometerse.