Lección 3 de 7: Llenar la “vacío de la madre” desde adentro para ir más allá del “horizonte maternal” - Bethany Webster

A pesar de lo que nos han enseñado, nuestra seguridad verdadera viene de adentro, no de cumplir estándares o expectativas externas. El patriarcado está construido sobre una mentira de inferioridad femenina y cómo hemos tenido que oprimirnos a nosotras mismas para cumplir estándares súper humanos mientras batallamos con una sensación de vergüenza y fracaso.

La verdad es que no podemos controlar cómo otras personas nos ven, sin importar qué tan complacientes o serviles somos.

Y no le debemos a nadie una versión de nosotros que sea complaciente. Llegamos a ser nuestro ser verdadero y auténtico, y a sentirnos amadas. Llegamos a equivocarnos sin vergüenza. Esto es parte de reclamar nuestra humanidad del patriarcado.

El vacío de la madre es lo que necesitábamos de nuestras madres pero no recibimos, por cualquier razón. Muchas de nosotras no recibimos suficiente validación, apoyo emocional y confirmación reiterada de que somos dignas de amor y suficientes tal como somos. Así que lo buscamos en el mundo externo y nos frustramos. Parte de volvernos soberanas es ser hábiles en darle a nuestra niña interior el amor y el consuelo que ella anhela y merece.

Las dos alas del “maternazgo interior” son ternura y ferocidad

Cuando cultivamos una relación interior de ternura, gentileza y compasión con nuestra niña interior, gradualmente llenamos el “vacío de la madre”, de amor que nos perdimos y somos menos susceptibles a ese auto-sabotaje y más resilientes frente a respuestas negativas y rechazo. La ferocidad involucra abrazar las partes de nosotras mismas que el patriarcado ha rechazado y afirmar nuestra completitud y humanidad intactas pase lo que pase. La ferocidad se trata también de estar cómodas con decir no y hacerlo una opción para alejarnos fácilmente de las personas, actividades y pensamientos que son dañinos, distractores y no en nuestro mejor interés.

A través de la ternura y la ferocidad (firmeza), gradualmente creamos una base firme de estabilidad y amor dentro de nosotras mismas fuera del viejo paradigma del patriarcado y apoyamos a otras mujeres para que hagan lo mismo.

Nuestra salvación no reposa en el viejo mundo que está menguando sino en el nuevo mundo que estamos dando a luz como mujeres, en el paisaje de nuestros corazones y mentes en transformación. Nuestros cuerpos dejan de ser una campo de batalla del patriarcado para ser una fuente respetada de sabiduría, amor y alegría.

Resumen para llevar del día 3:

La práctica del Maternazgo interior es cómo llenamos el “vacío de la madre” y una parte crucial de desmantelar el patriarcado en nosotras mismas y en el mundo.

Las dos “alas” del maternazgo interior son ternura y ferocidad.

Sanar nuestra niña interior involucra abrazar y honrar nuestras emociones auténticas pero sin quedarnos atascadas en ellas.

Aprendemos a amarnos a nosotras mismas, escuchar nuestros cuerpos y rechazar cosas que no son buenas para nosotras.

La validación externa solamente no puede llenar el vacío de la madre, que finalmente queda lleno con el tiempo a través de maternazgo interior consistente.

Tus defensas y síntomas no necesitan ser fuentes de vergüenza o de auto-crítica. Esos patrones y creencias problemáticos se formaron en respuesta a la disfunción y dolor cuando éramos niñas. No son defectos fatales, fueron cómo sobreviviste. Tus patrones dolorosos fueron como “úteros suplentes” que te ayudaron a obtener la aprobación cuando lo necesitaste como niña, cuando el amor de tus padres no estaba lo suficientemente disponible para tu verdadero ser.

Ahora, como mujer, puedes dar la bienvenida de vuelta a las partes de ti que tuviste que desconocer y reclamar tu totalidad, de esa manera transformar esas viejas creencias y comportamientos limitantes. Recuerda, entre más segura la niña interior se sienta en tu interior, más fácil es para ti cambiar, expandirte y crecer. Si la niña interior no se siente segura, se aferrará a creencias antiguas limitantes como un medio de permanecer segura.

“Permaneceremos atascadas como mujeres siempre que la niña interior aún crea que su seguridad está arraigada en el cumplimiento de las normas patriarcales”. ~Bethany Webster

Para el diario:

Ternura y validación: Cultiva la seguridad interior necesaria para ser audaz y auténtica:

• ¿Cuáles son tus memorias de ternura, comodidad y confortación cuando niña?

• ¿Tuviste suficiente?

• ¿Desarrollaste algunas estrategias o patrones para tratar de obtener suficiente amor y afecto cuando niña?

• ¿Cuáles son algunas de las maneras en las que puedes darte a ti misma ternura y seguridad interior diariamente ahora?

Ferocidad y Diferenciación: Desvincular la validación externa de tu sentido de autoestima:

• ¿Fuiste protegida cuando niña? ¿Tu madre te defendía?

• ¿Ella hablaba por ti?

• ¿Te ayudó a alejarte de cosas y personas dañinas?

• ¿Te enseñó discernimiento? ¿Cómo esto fue modelado o no modelado para ti? ¿Cómo esto influye en ti ahora?

• ¿Cuáles son las maneras en las que puedes comenzar a protegerte a ti misma, defenderte ahora?