Lección 1 de 7: El conflicto central en el corazón de la herida de la madre - Bethany Webster

Sin importar dónde estés en el mundo, ahora mismo es un momento importante para reflexionar sobre cómo la tensión en nuestras relaciones con nuestras madres impactan nuestro bienestar y sensación de ser.

Para muchas mujeres, el Día de la Madre puede traer detonantes y sentimientos complejos en torno al dolor que hemos heredado de nuestras madres y la presión que podemos sentir de ser leales a ella, de sostener las proyecciones e ilusiones de nuestra madre a costa de nuestro bienestar.

Debido al hecho de que vivimos en un mundo patriarcal que ve a las mujeres como “menos que”, hasta cierto grado, nuestras madres nos han pasado muchas creencias, valores y patrones que están en conflicto directo con nuestro deseo para entrar completamente en nuestro poder y soberanía.

Este conflicto está en el corazón de la Herida de la Madre, las maneras insidiosas en las cuales inconscientemente nos limitamos y nos saboteamos a nosotras mismas como una manera de sentirnos seguras y aprobadas.

La herida de la madre tiene un alto costo en cada área de nuestras vidas, cómo nos mostramos en relaciones románticas, cómo nos sentimos respecto a nuestros cuerpos, cómo somos madres, cómo nos sentimos respecto a nuestro potencial, solo por nombrar unos pocos.

Estamos viviendo tiempos de cambio y agitación sin precedentes, haciendo imperativo que resolvamos este conflicto interior, este negocio sin terminar y comprometernos con sanar la herida de la madre, para que podamos encuerpar auténticamente nuestra verdad y nuestro propio poder para nosotros mismos, la humanidad y la tierra en si misma.

Finalmente, esto no se trata de nuestras madres, al final, sino sobre reconocer nuestro poder sin vergüenza y hacer nuestra parte para romper ciclos de dolor en la familia colectiva humana.

Resumen para llevar del día 1

Las madres pueden reforzar inconscientemente el comportamiento servil en sus hijas como una forma de mantenerse seguras o como una forma de mantenerlas pequeñas y poco amenazadoras para ella como madre.

Los mismos valores, creencias y comportamientos que tu madre te transmitió pueden estar en conflicto directo con tu deseo de entrar en tu poder pleno y soberanía como adulta.

Esta tensión y conflicto entre lealtad a tu madre y lealtad a ti misma está en el corazón de la herida de la madre y ha mantenido a muchas mujeres pequeñas, deferentes y llenas de duda por sus propias vidas.

Resolver esta tensión es la clave para entrar en nuestro poder como mujeres y romper el ciclo de la herida de la madre en nuestras familias.

Para el diario:

¿Cuáles eran las creencias de tu madre respecto a su vida? 

¿Qué te expreso ya sea explícita o tácitamente, sobre lo que significaba ser mujer?

¿Sobre lo que era esperado, tabú o ideal? ¿Cómo te hizo sentir esto? ¿Cómo esto dio forma a tu visión de ti misma?

Si el día de la madre es estresante en términos de relacionarte con tu propia madre, ¿Cuál sería tu forma ideal de celebrar el día de la madre? Hablando de manera general, si tu podrías ser más auténtica y real para ti misma – en lugar de complacer a tu madre- ¿Cómo luciría ese día? ¿Cuál es ese paso que podrías dar para hacer de esto una realidad?

Fuente: https://www.bethanywebster.com/