El Umbral del Misterio - Jeff Foster

"¿Quién eres tú?"
Por favor, no regurgite respuestas de segunda mano a esta pregunta. No repita frases sin vida y memorizadas sobre la ausencia del yo, la perfección absoluta de la conciencia pura o la irrealidad del mundo.
Responde plenamente, no con palabras regurgitadas sino con todo tu ser. No trates de enseñar y no temas dar una respuesta incorrecta.
Deje que una respuesta viva se filtre por cada poro o no responda en absoluto.
Esta pregunta no puede quedar a medias, porque la vida no puede ir medio vivida.
Dime: ¿Qué te lleva hasta las lágrimas? ¿Las lágrimas de quién enjugas? ¿A quién abrazas mientras tiembla, se sacude y se caga en el olvido? ¿Qué te devasta? ¿A quién sostienes en la oscuridad y quién te sostiene allí? ¿Cuán profundamente puedes encontrarte con el que está frente a ti, sin alejarte por miedo? ¿Cuán profundamente has tocado esa compasión inefable que mueve mundos?
Dime cuán profundamente se te ha roto el corazón, cómo los terrores de tu infancia de abandono e intimidad a veces se han derretido en ríos de dolor desgarrador y angustia, gracia y amor más allá de la comprensión, cómo todos tus conceptos de lo que significa ser 'espiritual' o 'despierto' o incluso VIVO se ha derrumbado en cenizas y polvo, dejando solamente esta vida misteriosa en todo su esplendor, puro, indiviso, sin filtros y desnudo.
Dime quién eres, amigo, pero no me des ninguna conclusión mental o conceptualizaciones alejadas de tu experiencia real vivida.
Ningún maestro, ningún libro, ningún cuento fantástico de tu propio "despertar" o "transformación espiritual" te ayudarán aquí, en el umbral de este gran Misterio.
Quédate en silencio si es necesario.

- Jeff Foster

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