Sanando lo masculino

Mujeres,
Mientras sigamos en guerra con lo masculino
Rechazándolo
Odiándolo
Castrándolo
Enrabietadas
Alzando banderas, declarándonos “feministas” desde el enfado y el dolor de nuestra herida no sanada ni integrada con papá, la autoridad, otras figuras masculinas, ancestros, patriarcado, lo que estamos perpetuando, es el rechazo de esos aspectos dentro de nosotras, además de ceder nuestro poder y de seguir poniendo la atención fuera.
Es dentro.
Sí, dentro de cada una de nosotras hay energías vivas, con conciencia.
Una polaridad no existe sin la otra. Caminan juntas de la mano.
Todos tenemos energía masculina y femenina.
Lo que sientes hacia lo masculino, es lo que sientes hacia TU masculino.
Lo masculino que no te gusta ahí fuera, es lo masculino que no aceptas dentro.
Es un masculino introyectado, sin sanar.
Y lo que está dentro de nosotras, la relación que existe entre esas polaridades internas, esto es lo que manifestamos en el exterior.
¿Quieres una relación sana con un hombre?: Sana tu relación con tu energía masculina
¿De qué maneras TÚ, desde tu masculino, te abusas?
¿De qué maneras TÚ, desde tu masculino, te ignoras?
¿De qué maneras TÚ, desde tu masculino, no te respetas?
¿De qué maneras TÚ, desde tu masculino, no te honras?
Eso es lo que te vas a encontrar fuera.
Fuera es dentro.
Todo es un espejo.
Transitamos un camino de integración.
Vamos juntos hacia la unidad, no la separación.
Todo lo que te separa, es parte de este juego de ilusión.
Se habla mucho de la herida de lo femenino, pero también hay una herida de lo masculino.
El dolor de haberse escindido de su vulnerabilidad, su sensibilidad, su capacidad de sentir y ser recibido por lo femenino. El dolor de la pérdida de conexión.
Cuando una mujer ha hecho su trabajo de liberar el rechazo de su energía masculina, cuando ha establecido el diálogo interior entre su masculino y femenino, y uno le ha dicho al otro cómo necesita ser sostenido y qué necesita del otro.
 Cuando se ha reconectado con su cuerpo y su sabiduría interna sabe cómo puede sostener a un hombre, sostener el espacio en el que él puede conectar con su herida y proporcionarle esa sanación.
Conectar con todas las partes rotas y fragmentadas de él.
Y ... una transformación increíble es lo que sigue.
Porque cuando tu masculino fragmentado se recompone, toda la energía masculina que te rodea, se transforma. No puede ser de otra manera. Esta es la unión básica de la creación.
Tienes un papel fundamental en esto.
 Tienes el poder de acompañarlo en el camino hacia su corazón.
Puedes iniciarle, en el camino de amor que tú ya has emprendido.
Eres Alquimista.
Mujeres,
Si seguimos reivindicando una sola parte de estas dos energías tan poderosas, estamos tirando piedras sobre nuestro propio tejado.
Si seguimos alimentando el dolor y el rechazo, es que no nos estamos enterando de nada.
Lorena Cuendias
www.mujeralquimia.com
IG @mujeralquimia.com

Fuente: Muro de Mujer Alquimia

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