Las mujeres, no somos volubles; somos cíclicas.
Como la Luna, tenemos cuatro fases en el mes y cuatro etapas en nuestro viaje femenino.
En la fase de la Luna Creciente expresamos a la doncella con toda la energía de sus semillas (físicas y emocionales) en franco crecimiento y búsqueda.
En la fase de Luna Llena, expresamos la plenitud de la fuerza generativa de la vida (la Madre en todas sus acepciones).
En la fase de Luna Menguante expresamos a la mujer que ha acopiado la sabiduría de los años vividos (etapa de la menopausia )
En la fase de la Luna Nueva o Negra, expresamos la energía de la Anciana Sabia, la Chamana, la Sanadora..
Esta ciclicidad ocurre todos los meses en una mujer.Y esta cualidad es nuestro tesoro y nuestra alquimia, no nuestra tortura.
Y sabes que fase de la Luna hay hoy ?...
La Luna Nueva se está formando.
Época de hibernación, de quietud y de renovación.
La Anciana ha cultivado el don del silencio, la escucha, y el desapego. Sabe que en el vacío y en la muerte está la semilla de un renacimiento. Es sabia y visionaria.
Fase de introspección, de descanso y de conexión con lo más profundo en nosotras, el lugar en donde las visiones creativas se gestan.
Es Hestia, la Diosa del hogar, cuidadora del mundo interior y del fuego sagrado, su símbolo es el círculo y nos lleva a la esencia.
Es Innana, antigua diosa sumeria, que abandona su lugar como ‘Reina del Cielo’ para bajar al submundo, encontrarse con su hermana Ereshkigal, y allí morir y renacer. Personifica el viaje de la heroína y del alma, hacia lo más profundo, para volver con el tesoro de la sabiduría.
Es Hécate, Diosa griega de la luna negra, guardiana de los cruces y de la intuición profunda, ofrece su sabiduría y guía para atravesar la oscuridad.
Es Ceridwen, Diosa galesa, guardiana del caldero de la inspiración y de la sabiduría, manifestación de la creatividad y destrucción universales en la transformación eterna.
Su rito de paso es la muerte y los tiempos de transición, pérdida y envejecimiento. Con la comprensión cíclica de la vida y la muerte, entendemos que sin desintegración no hay renovación.
Fuente: https://mujerciclica.com/arquetipos/anciana/
En la fase de la Luna Creciente expresamos a la doncella con toda la energía de sus semillas (físicas y emocionales) en franco crecimiento y búsqueda.
En la fase de Luna Llena, expresamos la plenitud de la fuerza generativa de la vida (la Madre en todas sus acepciones).
En la fase de Luna Menguante expresamos a la mujer que ha acopiado la sabiduría de los años vividos (etapa de la menopausia )
En la fase de la Luna Nueva o Negra, expresamos la energía de la Anciana Sabia, la Chamana, la Sanadora..
Esta ciclicidad ocurre todos los meses en una mujer.Y esta cualidad es nuestro tesoro y nuestra alquimia, no nuestra tortura.
Y sabes que fase de la Luna hay hoy ?...
La Luna Nueva se está formando.
Época de hibernación, de quietud y de renovación.
La Anciana ha cultivado el don del silencio, la escucha, y el desapego. Sabe que en el vacío y en la muerte está la semilla de un renacimiento. Es sabia y visionaria.
Fase de introspección, de descanso y de conexión con lo más profundo en nosotras, el lugar en donde las visiones creativas se gestan.
Es Hestia, la Diosa del hogar, cuidadora del mundo interior y del fuego sagrado, su símbolo es el círculo y nos lleva a la esencia.
Es Innana, antigua diosa sumeria, que abandona su lugar como ‘Reina del Cielo’ para bajar al submundo, encontrarse con su hermana Ereshkigal, y allí morir y renacer. Personifica el viaje de la heroína y del alma, hacia lo más profundo, para volver con el tesoro de la sabiduría.
Es Hécate, Diosa griega de la luna negra, guardiana de los cruces y de la intuición profunda, ofrece su sabiduría y guía para atravesar la oscuridad.
Es Ceridwen, Diosa galesa, guardiana del caldero de la inspiración y de la sabiduría, manifestación de la creatividad y destrucción universales en la transformación eterna.
Su rito de paso es la muerte y los tiempos de transición, pérdida y envejecimiento. Con la comprensión cíclica de la vida y la muerte, entendemos que sin desintegración no hay renovación.
Fuente: https://mujerciclica.com/arquetipos/anciana/
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