Los Pasos del Focusing

El proceso de focusing se experimenta desde adentro, es fluido y abierto.
El acto interno del focusing se puede dividir en seis etapas, pasos o movimientos. 

1. Despejar el Espacio

Primero es conveniente centrar la atención en tu cuerpo, sentirlo tranquilo y relajado, sentir tus pies, piernas, tronco relajado. Relajar tus brazos, tu cara, tu cabeza. Realizar 1 o 2 inspiraciones y exhalaciones. Para luego prestar atención a la parte interior de tu cuerpo. Darte cuenta de cómo se siente tu garganta, pecho, estómago y abdomen. Fijate como se siente allí, en tu espacio interior, acerca de cómo tu vida va aconteciendo. 
Preguntate: ¿Cómo mi vida va aconteciendo? ¿Hay algo importante en mi vida que quiera visitarme ahora? Espera la respuesta de tu cuerpo. Si aparece algo, no te metas dentro de eso, solo toma consciencia de que algo aparece. 
Y en todo caso te dices para vos misma: Sí, eso es, se que viene a visitarme ahora..., puedo sentirlo en mi cuerpo. Fijate si puedes alejarlo un poco de tu cuerpo, como para poder verlo a una cierta distancia. Luego de unos momento, vuelve a tu espacio interior y pregúntate, ¿Hay algo más que me impida sentirme plenamente feliz?. 
Espera unos minutos y escucha la respuesta de tu cuerpo. Si algo aparece no te metas dentro de eso, sólo toma consciencia de que algo aparece, dedícale unos pocos segundos y nuevamente lo alejas de tu cuerpo gentilmente. Vuelve a tu espacio interior y repite el procedimiento. Raramente aparezcan más de cinco cosas, pero es recomendable realizarlo las veces que sea necesario.
Imagina que cada uno de tus asuntos puede ser identificado, envuelto en un papel y lanzado fuera de tu cuerpo, sobre un banco de plaza imaginario. Durante la etapa de “Despejar un Espacio”, aíslas, empacas y envías cada uno de estos asuntos, hasta que no quede ninguno en lo absoluto. En este espacio despejado, un lugar en donde ya no hay más asuntos pendientes y de saturación dentro de tí, es muy probable que te sientas con un mínimo de stress y un creciente sentido de relajación.

2. Escoger Una Preocupación

El siguiente paso es escoger algún asunto sobre el cual desees trabajar y que cada parte de tí, incluyendo tu cuerpo en su totalidad, acepte quedarse por cinco a diez minutos con aquello.

3. Encontrar una Sensación Sentida

Tu cuerpo ya ha sentido ese "algo", esa sensación corporal de algo que apareció. Elije una de las situaciones que han aparecido anteriormente para focalizar, invita a tu cuerpo a que forme una sensación de ese problema o situación. La sensación sentida es física, es vaga y difusa al principio pero luego va tomando su forma. Puedes, desde tu espacio interior, ir sintiendo la totalidad del problema, ir teniendo una sensación corporal de el problema
En el tercer paso, invitas a la sensación corporal sentida a tomar forma alrededor del asunto específico que has escogido para trabajar. Una sensación sentida es un conjunto organizado de sentimientos que es significativo y que como conjunto está conectado con algún asunto de tu vida. Algunas veces, la sensación sentida está presente en forma instantánea; otras veces necesitas esperar pacientemente mientras aparecen preguntas como la siguiente: ¿Cuál es mi sensación acerca de este asunto?”

4. Encontrar Un Asidero (Símbolo o imagen certera)

¿Cuál es la cualidad de esa poco clara sensación sentida? Deja que una palabra, frase o imagen surja de la sensación sentida. Podrá ser una cualidad tal como: opresivo, pegajoso, asustado, sobresaltado, estancado, temeroso; o bien una frase o una imagen. Disponte a pasar unos minutos, como quien se sienta con un amigo, con eso que aparece y su cualidad emocional.
Cuando una sensación sentida ya ha hecho su aparición, avanzas hacia el siguiente paso, “Encontrar un Asidero”. En este paso tú ves si hay una palabra, frase, imagen o sonido que simbolice con alguna precisión todo el sentido de esta preocupación o problema. A este símbolo se le llama un asidero. A menudo, contiene palabras acerca de la calidad tal como “pesado”, “estancado”, “duro”, “blanco” ,“saltarín”, “escurrediso”, etc.

5. Resonar El Asidero( o la imagen)

Coteja, chequea, la sensación sentida con esa palabra, frase o imagen. Fíjate cómo se siente la sensación corporal con esa palabra que le ofreces. Por ejemplo: ¿Es realmente asustado como se siente? En caso negativo, deja que surja otra y ofrécela nuevamente a la sensación sentida para chequear si es realmente esa así (como la palabra lo indica) como se siente. Coteja cuantas veces sea necesario hasta que la sensación sentida pueda reconocer que es de esa manera como se siente.
En el quinto paso tú empiezas a verificar si el asidero se ajusta a la sensación sentida. Este proceso de verificación, que puede ocurrir sólo en una o en varias ocasiones, pudiendo llamarse la resonancia del asidero. Si no encajase en el primer intento, se sigue buscando palabras o imágenes que encajen mejor cada vez, hasta que finalmente la sensación sentida acepta su imagen certera.

6. Hacer Preguntas finales para posibles nuevos ajustes.

Pregunta: ¿De qué se trata todo esto? ¿Qué es lo que lo hace tan...........(asidero-cualidad emocional)? O quizá puedas preguntar ¿Qué en mi vida se siente como esto?
Quedate con la sensación sentida el tiempo que sea necesario hasta que algo traiga un "cambio", un "Viraje". Este cambio o viraje es lo que trae alivio a la situación
En el sexto paso se hacen preguntas tentativas a la sensación sentida para ver si ella cambia. Algunas preguntas típicas incluyen: ¿Qué es lo peor de esto?”, “¿Qué se necesita?”, “¿Qué es necesario que pase aquí?, y “¿Qué puedo hacer para facilitar un paso en la dirección correcta en este asunto?”. En cada ocasión debes esperar que la respuesta de la sensación sentida provenga desde tu interior.

7. El Cambio Sentido

Recibe cualquier cosa nueva que aparezca de una manera cordial, amigable. Quédate haciéndole compañía, aunque solo sea un pequeño alivio. Cualquier cosa nueva que aparece es un viraje, un cambio, luego vendrán otros.
Si durante estas instrucciones has pasado algún tiempo sintiendo o en contacto con una sensación corporal vaga o difusa de algún problema, entonces has estado haciendo Focusing. No importa si has tenido un cambio o no, has comenzado ya a hacer Focusing.
Cada vez que la sensación sentida cambia o se mueve, a dicho movimiento se le llama un cambio sentido. En el último paso tú deberías aceptar cualquier sentido que haya obtenido. Algunas veces los cambios resultan ser visiones o imágenes más completas con una clara sensación de liberación corporal. Otras veces los cambios son más sutiles. No obstante, la mayoría de la gente se ha dado cuenta que al sólo pasar tiempo en esta amigable forma con un asunto o preocupación, se crea un proceso sanador, aún cuando no se vean respuestas inmediatas a corto plazo.

Fuente: https://www.focusing.org/es/focusing_una_herramienta_corporal_y_mental_klagsbrun_trad_riveros_031209.pdf

Commentaires

Articles les plus consultés