El regalo de la humillación - Jesse Lyn Stoner
A nadie le gusta sentirse humillado. Duele. Y junto con el dolor usualmente llega la rabia. Es una reacción natural. Es la manera en que su ego se protege a sí mismo. Puede estar furioso con la persona que causó su humillación, o puede llevar su rabia hacia adentro, contra sí mismo.
El daño y la ira son las primeras respuestas naturales a la humillación. Pero si esta es su única respuesta, perderá la oportunidad que viene con ella.
La humillación puede ser un llamado a despertar. Cómo responde a ella significa la diferencia entre permanecer bloqueado en un patrón que no le sirve y experimentar un cambio que lo transforme para mejorar. Este es el regalo de la humillación.
La humillación con frecuencia llega como resultado de una evaluación exagerada de sus habilidades. Jeff pensó que era un gran líder de equipo. Frustrado porque su equipo no sobresalía, los culpó de ser peresozos y poco comprometidos. Imagine su sorpresa cuando su jefe lo llamó diciendo que su estilo de liderazgo era la razón por la que su equipo no daba resultados.
Otras veces la humillación puede venir cuando aún está aprendiendo y le falta confianza. Recientemente promovido a una posición de gerencia, se le pidió a Marcela hablar en la reunión anual. Aunque ella había practicado su discurso durante semanas, supo que había fracasado cuando todos la evitaron después.
Jeff pudo haberse puesto a la defensiva y culpar a su jefe. Marcela pudo haber decidido no hablar nunca más en público.
En cambio, ellos trataron su humillación como un llamado a despertar. Jeff decidió tener una conversación con su equipo y tomar sus opiniones sobre cómo podría ser mejor jefe. Marcela comenzó a trabajar con un coach para hablar en público. Ellos cambiaron las cosas y lo más importante, desarrollaron una credibilidad y humildad real.
La culpa es una distracción. Cuando usted culpa a otros, lleva su foco lejos de sí mismo y de la oportunidad de aprender y crecer. Cuando se culpa a sí mismo, mantiene su foco en la equivocación - sintiéndose mal - y permanece bloqueado.
Para cosechar el regalo de la humillación, necesita reconocer su parte en lo que sucedió, hacer las pases si se lo piden, y luego enfocar sus energías en la oportunidad de aprendizaje que le ha sido dada.
Recientemente tuve una oportunidad para ponerme al día con un buen amigo Bill Treasurer sobre su nuevo libro A Leadership Kick in the Ass. Bill habla sobre la "humillación transformacional", la clase de humillación que crea una transformación profunda en la manera en la que ve al mundo, a los otros y a sí mismo.
Bill dice que las mayores lecciones de liderazgo con frecuencia vienen en la forma de una sacudida asombrosa. La gran cosa sobre una sacudida repentina es que lo toma desprevenido. En los momentos en que es sacudido, antes de que el dolor, la rabia y la culpa se asienten, hay una oportunidad de un inmenso momento "ajá". Esa es su oportunidad transformadora.
Toma su atención, alumbra una luz sobre sus sombras y le motiva a hacer algo diferente.
Para algunas personas toma una tragedia personal tener la sacudida. Para otras, la conmoción de no lograr una meta que pensó merecía. O comentarios duros como Jeff y Marcela.
El regalo de la humillación es que puede llevar a la humildad. Como Bill dice, "cuando te humillas, te vuelves humilde"
La caída desde arriba puede ser doloroda, pero si desarrolla humildad cuando aterriza, valió la pena. Así que la próxima vez que reciba una sacudida, recuerde que la única cosa que es realmente dañada es su ego, una estructura de defensa rígida que no deja entrar los sentimientos malos - y buenos - y mantiene es status quo.
"La verdad solo daña si debe. – Gandhi
El dolor es su regalo. Destápelo y conviértase en el lider que está destinado a ser.
Este post fue escrito en honor al maravilloso libro de Bill Treasurer, A Leadership Kick in the Ass. Aprenda más sobre humillación transformadora, las clases de patadas que es probable que reciba y cómo beneficiarse de ellas, y cómo patear su propio trasero para que pueda mantener su ego bajo control. No solamente es una lectura fácil y divertida, sino que Bill provee consejos prácticos que puede poner en acción de inmediato.
Tomado de: http://seapointcenter.com/the-gift-of-humiliation/
El daño y la ira son las primeras respuestas naturales a la humillación. Pero si esta es su única respuesta, perderá la oportunidad que viene con ella.
La humillación puede ser un llamado a despertar. Cómo responde a ella significa la diferencia entre permanecer bloqueado en un patrón que no le sirve y experimentar un cambio que lo transforme para mejorar. Este es el regalo de la humillación.
La humillación con frecuencia llega como resultado de una evaluación exagerada de sus habilidades. Jeff pensó que era un gran líder de equipo. Frustrado porque su equipo no sobresalía, los culpó de ser peresozos y poco comprometidos. Imagine su sorpresa cuando su jefe lo llamó diciendo que su estilo de liderazgo era la razón por la que su equipo no daba resultados.
Otras veces la humillación puede venir cuando aún está aprendiendo y le falta confianza. Recientemente promovido a una posición de gerencia, se le pidió a Marcela hablar en la reunión anual. Aunque ella había practicado su discurso durante semanas, supo que había fracasado cuando todos la evitaron después.
Jeff pudo haberse puesto a la defensiva y culpar a su jefe. Marcela pudo haber decidido no hablar nunca más en público.
En cambio, ellos trataron su humillación como un llamado a despertar. Jeff decidió tener una conversación con su equipo y tomar sus opiniones sobre cómo podría ser mejor jefe. Marcela comenzó a trabajar con un coach para hablar en público. Ellos cambiaron las cosas y lo más importante, desarrollaron una credibilidad y humildad real.
La culpa es una distracción. Cuando usted culpa a otros, lleva su foco lejos de sí mismo y de la oportunidad de aprender y crecer. Cuando se culpa a sí mismo, mantiene su foco en la equivocación - sintiéndose mal - y permanece bloqueado.
Para cosechar el regalo de la humillación, necesita reconocer su parte en lo que sucedió, hacer las pases si se lo piden, y luego enfocar sus energías en la oportunidad de aprendizaje que le ha sido dada.
Recientemente tuve una oportunidad para ponerme al día con un buen amigo Bill Treasurer sobre su nuevo libro A Leadership Kick in the Ass. Bill habla sobre la "humillación transformacional", la clase de humillación que crea una transformación profunda en la manera en la que ve al mundo, a los otros y a sí mismo.
Bill dice que las mayores lecciones de liderazgo con frecuencia vienen en la forma de una sacudida asombrosa. La gran cosa sobre una sacudida repentina es que lo toma desprevenido. En los momentos en que es sacudido, antes de que el dolor, la rabia y la culpa se asienten, hay una oportunidad de un inmenso momento "ajá". Esa es su oportunidad transformadora.
Toma su atención, alumbra una luz sobre sus sombras y le motiva a hacer algo diferente.
Para algunas personas toma una tragedia personal tener la sacudida. Para otras, la conmoción de no lograr una meta que pensó merecía. O comentarios duros como Jeff y Marcela.
El regalo de la humillación es que puede llevar a la humildad. Como Bill dice, "cuando te humillas, te vuelves humilde"
La caída desde arriba puede ser doloroda, pero si desarrolla humildad cuando aterriza, valió la pena. Así que la próxima vez que reciba una sacudida, recuerde que la única cosa que es realmente dañada es su ego, una estructura de defensa rígida que no deja entrar los sentimientos malos - y buenos - y mantiene es status quo.
"La verdad solo daña si debe. – Gandhi
El dolor es su regalo. Destápelo y conviértase en el lider que está destinado a ser.
Este post fue escrito en honor al maravilloso libro de Bill Treasurer, A Leadership Kick in the Ass. Aprenda más sobre humillación transformadora, las clases de patadas que es probable que reciba y cómo beneficiarse de ellas, y cómo patear su propio trasero para que pueda mantener su ego bajo control. No solamente es una lectura fácil y divertida, sino que Bill provee consejos prácticos que puede poner en acción de inmediato.
Tomado de: http://seapointcenter.com/the-gift-of-humiliation/
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