El genio social de la envidia - Karla McLaren
La envidia (y su compañero los celos) en general son tratados mal, pero la envidia es en realidad listada como uno de los siete pecados mortales en la tradición Católica.
Podríamos decir que los primeros católicos tenían la intención de advertir a las personas en contra de actuar agresivamente con su envidia, pero aún así, llamaron pecado a una emoción humana necesaria. Eso no es útil.
Tu envidia es una emoción social vital, que te ayuda a comprender tu mundo social y crear seguridad y protección para ti mismo y para los demás. ¡Sería un pecado no tener envidia!
Envidia: Radar Interactivo
DONES: Equidad ~ Generosidad ~ Seguridad ~ Acceso a recursos ~ Reconocimiento adecuado ~ Auto-conservación
LO QUE DEBE HACERSE: Discernir si estás respondiendo a la equidad en los intercambios sociales y verificar tu amor propio y tu autoestima. ¿Tienes acceso saludable y apropiado a recursos y reconocimiento? ¿Todos los demás en la situación?
LAS PREGUNTAS INTERIORES: ¿Qué recursos y seguridad deseo para mi misma y para los demás? ¿Qué desigualdades deben corregirse?
El genio en la envidia
Cuando tu envidia fluya libremente, no parecerás abiertamente envidioso o codicioso; en cambio, tu seguridad interna te permitirá posicionarte bien en el mundo mientras celebras los logros y reconocimientos de los demás (incluso cuando no son merecidos).
Los dones de la envidia: "La envidia me ayuda a ver y querer lo que es valioso, hermoso, justo y necesario, para mí y para los demás”.
Sin embargo, cuando deshonras tu envidia, puede que tengas problemas para pedir o que necesitas o puedes desestabilizar tus relaciones y estructuras sociales agarrando todo lo que pueda y trabajando activamente para tomar (o criticar) lo que otros tienen.
La envidia es similar a los celos en que contiene una mezcla de ira que restablece los límites y de miedo intuitivo. La diferencia entre estas dos emociones es que la envidia te ayuda a establecer y preservar tu posición social y tu seguridad material mientras que los celos se enfocan en la salud y estabilidad de tus amistades y relaciones amorosas.
¿Cómo funciona la envidia?
La envidia te ayuda a comprender y apoyar la distribución justa y equitativa de recursos y reconocimiento y responde a los desafíos (y amenazas) para tu posición social y tu conexión con los recursos (dinero, alimento, privilegios, protección, pertenencia y estatus).
La envidia te defiende en casos de injusticia o favoritismo, o cuando te han quitado (o parece que te han quitado) recursos en deferencia a otro.
La envidia ha sido tildada injustamente como una emoción primitiva y destructiva junto con los celos. Pero al igual que los celos, la necesidad de envidia no ha disminuido en ninguna población desde el comienzo de la humanidad. Somos una especie social, lo que significa que tanto los celos como la envidia son necesarios para monitorear nuestras conexiones sociales, presiones sociales y posicionamiento social.
En el mundo moderno, los desafíos y amenazas a nuestra posición social y nuestra habilidad para reunir recursos no ha disminuido de ninguna manera. Ahora requerimos más dinero, más recursos, más cosas y más infraestructuras extensas sólo para alimentarnos que nuestros ancestros.
Esto significa que el poder y la intuición en la envidia – que nos ayuda a conectar y monitorear nuestras fuentes de seguridad material y social – aún son increíblemente necesarias para nuestra supervivencia. La envidia tiene una función crucial protectora: nos mantiene conectados de manera segura con las estructuras sociales y soporte material que necesitamos para vivir y florecer.
Gracias envidia!
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